EL HOMBRE COMO MEDIDA DE TODAS LAS COSAS.

24 Noviembre 2009.

El alma como contenido o resultado del conocimiento dado por el intelecto del cerebro, es el desarrollo y la evolución del conocimiento intelectual hacia lo perfecto. De acuerdo con esta verdad innegable, el ser humano -único ser que hay en la tierra que tiene el conocimiento intelectual, es decir la capacidad de todo sujeto para distinguir y comprender el objeto- es la medida de todas las cosas, las que son en cuanto que son y las que no son en cuanto que no son; tal y como dijo el gran sabio y maestro PROTAGORAS.

Ciertamente, como dijo este gran pensador, el ánthropos posée -en virtud de la pluralidad de subjetividades que tiene debido a que su conocimiento es primario y limitado por imperfección- dos concepciones importantes para la medida de las cosas: una, la del hombre como ser individual, afectado siempre por las particularidades intrínsicas que le diferencian de todos los demás hombres; dos, la del hombre como ser que vive en sociedad, con peculiaridades mentales distintas según al grupo social y sociedad de que forme parte.

En la concepción individualista la pluralidad subjetiva del hombre, dado que su concepción es singular con respecto a la de los demás, existe la contradicción en la medida de las cosas simplemente.

Pero es en la concepción sociológica, donde la pluralidad subjetiva del hombre se acentúa al máximo, dado que es la del grupo social y sociedad de la que forma parte, existiendo la contradicción en la medida de las cosas en dos sentidos: uno, impositiva, frente al individuo que no acepta la medida y dos, de lucha o enfrentamiento, cuando hay distintos grupos sociales y sociedades; siendo este segundo el verdadera y únicamente peligroso para desarrollar la medida no errada, es decir más evolucionada.

Crisoldeltiempo.

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